Economía social
Los gobernantes de Colombia y los dirigentes cooperativos, siempre han considerado a la Economía Social como un instrumento útil para promover el desarrollo económico y social del país dentro de un marco de democracia y ayuda mutua.
Es sin duda este concepto de «ayuda mutua» como lo afirmaba PETER KROPOTKIN, científico ruso «es un principio de la naturaleza humana que constituye la base de la organización de la humanidad», por oposición a la teoría de DARWIN, según la cual en la naturaleza se daba «la supremacía del más fuerte» y más tarde el concepto de que «el hombre es enemigo del hombre» no son completamente ciertas pues además del «amor, la simpatía y el auto sacrificio», la solidaridad humana es el verdadero pilar en que se apoya el desarrollo de la humanidad, constituyéndose así la ayuda mutua en factor de constante progreso.
Hoy que nuestro país, igual que los demás países latinoamericanos esta empeñado en superar la profunda crisis experimentada en las décadas anteriores, reflejada en la reducción de los términos de intercambio, restricciones al financiamiento externo, contracción del ingreso real, déficit fiscal, elevadas tasas de inflación, pérdida de la conciencia democrática y fenómenos de violencia y convulsión social; no es menos cierto que la Economía Solidaria a través de su filosofía y mecanismos de acción, puede contribuir a superar los fenómenos de pobreza en que se debate el pueblo colombiano y latinoamericano.
A través de los objetivos, políticas y estrategias del Cooperativismo, del Gobierno o de quien asuma esa responsabilidad y mediante el desarrollo de las distintas actividades y programas, aspiramos a cumplir satisfactoriamente la misión que se nos ha encomendado a las instituciones de Capacitación y Educación Cooperativa y Solidaria para orientar el desarrollo de la Economía Solidaria en Colombia, lo cual ejecutamos a través de la promoción, capacitación, orientación e impulso, en forma concertada y participativa a la comunidad que desee organizarse bajo las distintas formas autogestionarias solidarias, democráticas y humanistas, para el desarrollo integral del ser humano, como sujeto, actor y fin de la economía solidaria, considerando al sector, como un instrumento útil para el desarrollo económico y social del país.
Promovemos cuando estimulamos a las personas para que se organicen en forma solidaria, cuando les capacitamos y orientamos en torno a los principios e ideales del cooperativismo y en general de la Economía social, cuando les mostramos nuevas alternativas de progreso y desarrollo personal y social a través de la cooperación, cuando orientamos sus organizaciones hacia el cumplimiento de las normas y procedimientos, cuando contribuimos en el control de tales entidades, para que la rectitud en su funcionamiento y operación, sea la norma básica de su comportamiento organizacional, cuando apoyamos con decisión y asistencia el éxito de su gestión.
Lo hacemos en forma participativa cuando nos interesamos y compartimos sus éxitos y sus problemas cuando no juzgamos sino orientamos el accionar de las personas y las instituciones, cuando no nos conformamos con ser espectadores pasivos de las actividades cooperativas y sociales, sino que compartimos con ellos las dificultades y los aciertos, cuando como promotores estamos dispuestos a servir como si el provecho ajeno fuera propio, cuando en nuestras relaciones con las entidades y personas actuamos con un sentido práctico de» ayuda mutua».
Concertamos, cuando optamos por el acuerdo de voluntades antes que el dominio de las ideas o acciones, cuando respetamos los criterios ajenos y nos comprometemos en sacar adelante ideas que sin ser nuestras, contribuyan al bienestar de la comunidad, cuando a pesar de nuestras diferencias, sacrificamos el saber, el conocimiento y el orgullo en pro de ideales nobles y constructivos, cuando concebimos el esfuerzo colectivo en la solución de los problemas, cuando somos más porque adquirimos responsabilidades comunitarias y nos sentimos de ello orgullosos.
Hablamos de desarrollo cuando con nuestras ideas y acciones buscamos colectivamente, obtener mejores condiciones de vida, satisfacer nuestras necesidades en forma oportuna y con mayor satisfacción, cuando la vida se nos hace mas corta y mas bella, cuando el sufrimiento no existe o es mas llevadero para la humanidad, cuando miramos a nuestro alrededor y no vemos gente sin alimento, sin salud, sin educación, sin vivienda, sin empleo, sin recreación, cuando observamos gente sana, alegre, realizada es decir; solo observamos el bienestar.
Nos referimos a organización cuando consideramos como un todo integrado, recursos humanos, materiales, financieros y administrativos, encaminados a alcanzar objetivos y metas específicas de desarrollo material y social.
Conceptuamos la Economía Solidaria como aquel conjunto de organizaciones estructuradas para alcanzar objetivos de desarrollo, dentro de un marco de amplia participación, democracia, equidad, responsabilidad compartida, libertad para hacer el bien, ayuda mutua y mejoramiento colectivo.
Son reconocidas jurídicamente las siguientes:
- Cooperativas
- Precooperativas
- Asociaciones Mutuales
- Fondos de Empleados
- Juntas Comunitarias
- Empresas Solidarias de Salud
- Empresas Asociativas de Trabajo
- Asociaciones de Productores
- Proyectos rentables comunales
El Cooperativismo y la politica social 